Volvemos al tema escatológico. Y es que cuando se es padre, uno se tiene que sacar un master revisando pañales.

Un día cambiando el pañal a Víctor las vimos: negras negrísimas, vamos, ¡un susto! ¿Cómo pueden salir unas cacas de ese color"

Nos preocupamos un poco, bueno, vale, yo me preocupé, mi marido no le dio mayor importancia. Pero no sólo fue un día, fueron tres seguidos, cada vez que hacía cacas salían negras, así que empecé a investigar.

Lo primero que hice es mandarle un mensaje a mi cuñada, mamá de 3 que seguro ha tenido que ver cacas de todos los colores, pero no me contestaba y yo necesitaba respuesta urgente. ¿Quién me da respuestas siempre" ¡eso es!, Google, pues a él le pregunté. "Señor Google que todo lo sabe, ¿a qué se puede deber el color de estas deposiciones en un niño pequeño"".
Muy listo él me dio a elegir entre 231.000 respuestas, me decanté por la primera que venía de una página de las que tengo confianza, Mi pediatra online. Empecé a leer y me empecé a asustar, pero en cuanto vi el listado de los motivos para que tuviesen ese color lo vi claro: ¡Las galletas Oreo!

Misterio resuelto. Hace unos días, yendo al supermercado, se le antojaron. En casa no las comemos nunca, así que no sabía de sus "efectos secundarios". En dos días se había acabado el paquete él solito y al parecer fue eso lo que le dio ese color a sus caquitas.

Se lo conté a mi cuñada, que aún no había p...