Cuando leí por primera vez la palabra Hygge, lo hice unida a la siguiente frase "el secreto de la felicidad de los daneses".

Enseguida quise saber más de ese término, ya que en el artículo afirmaban que Dinamarca es el país más feliz del mundo.

Y resulta que Hygge (se pronuncia hu-ga) está unido a sentirse bien en casa, disfrutarla en una reunión con amigos, compartirla haciendo toda la familia un bizcocho y comerlo juntos con un chocolate caliente...en definitiva, hacer de nuestro hogar un lugar muy acogedor.

Precisamente, es lo que pretendo transmitirte en este blog.

Tener un hogar organizado hace que sientas calma al volver a él, que es precisamente la clave de un hogar acogedor.

Pero muchas veces al volver a casa, no sientes precisamente eso, sino todo lo contrario. 
De hecho el entrar por la puerta de casa, hace que te alteres todavía más. 

Y después de todo el día, eso es exactamente lo contrario de lo que necesitas.

1. Exceso de Cosas Materiales

Uno de los problemas que hacen que tu hogar no sea tan acogedor es el exceso de cosas materiales. 

Quizá tengas acumulados más muebles de los que deberías en una sola estancia y la notas recargada. 

O tienes los armarios llenos hasta los topes, tanto que no puedes ver todo lo que contienen.

Sin duda, el primer paso que yo daría hacia un hogar acogedor, sería eliminar el exceso de pertenencias materiales. 

2. Mezcla de colores desafortunada 

Piensa e...