Hace unas semanas me enteré del fallecimiento de una pequeña, la verdad es que no la conocí ni a  ella ni a su madre sin embargo desde que soy mamá lo bueno y lo malo que le ocurre a un pequeño me puede mucho. Me dejó pensando que haría  si alguna de mis hijas faltara y sin duda comencé a pensar que a veces damos por hecho que nuestros hijos crecerán, que  habrá tiempo. Y la realidad es que no siempre es así, algunos pequeños se congelan en el tiempo, se van antes, dejando ese “ya crecerán” vacío.
Te confieso que muchas veces antepongo  mis “cosas de grandes” a mis hijas, siento que todo es urgente y que ellas siempre estarán ahí, pero esto me sacudió mucho, la pequeña  tenía 4 años, como mi hija Milú.  Cuando llegué a casa  no podía dejar de verla, notar que estaba creciendo ante mis ojos y  no lo estaba aprovechando, cerré los ojos y entendí que   el mejor tiempo es el ahora,  no puedo fiarme del tiempo que a nadie le es leal. Quise contarte esto pues si como yo a veces das por hecho que tus hijos siempre estarán ahí, es momento que cambies ese pensamiento y no es que vayamos por la vida pensando que podemos perderlos en cualquier momento, es solo valorar el tiempo que tenemos con ellos. A veces la vida da giros dolorosos y nos toca despedirnos de lo que mas amamos antes de lo que hubiéramos deseado sin embargo hagamos que el tiempo que tenemos a su lado sea mágico, sea real, no les demos lo que nos so...