Al final, tal y como yo pensaba, la regla hizo su aparición y lo peor es que se me adelantó. Esto hace que mis posibilidades de concebir en este nuevo ciclo sean casi nulas, ya que me voy una semana fuera por un tema de trabajo y mi ovulación cae justo en esos días. A no ser que se me retrase o que cambien las fechas del viaje, cosa que no creo que ocurra, este va a ser un mes como otro cualquiera de antes de empezar la búsqueda, y creo que me va a venir bien.
El viernes, el día que me vino, tuve un momento de bajón, de llorar sin poder parar las lágrimas, igual el pasado fin de semana, y de sentirme fatal por no poder ni intentarlo este nuevo ciclo. Se me pasó muy rápido (había muchas hormonas involucradas seguro) y desde entonces estoy bastante normal, ni súper positiva con la vida ni arrastrando mis penas por la casa, normal. Esto me ha hecho darme cuenta de lo que he cambiado en estos tres meses de búsqueda. Recuerdo cuando aún no habíamos empezado a buscar y yo leía blogs y todo tipo de información sobre preconcepción y embarazo, y daba con las experiencias de algunas futuras mamás tristes y estresadas porque cada ciclo les volvía a venir la regla. Yo pensaba que no iba a ser así, que me tomaría la búsqueda de manera tranquila, sin prisas, sin hacerme test, sin preocuparme demasiado... Pero no ha sido así.
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A ver, no me paso todo el mes obsesionada, ni mucho menos, pero cuando pasa la fecha de la ovulación si que estoy más pendi...