Sin lugar a dudas, la salud es uno de los aspectos que más preocupa a los padres respecto a sus hijos. Precisamente por ese motivo es fundamental que los adultos lleven a sus hijos a las correspondientes revisiones médicas que se establecen, por ejemplo, para los bebés durante su primer año de vida.
Sigue leyendo y podrás descubrir cuáles son. Eso sí, debes ser consciente de que son vitales a la hora de prevenir enfermedades, detectar posibles anomalías en el desarrollo del pequeño, prevenir también infecciones para la salud del bebé e incluso tranquilizar a los progenitores con respecto al bienestar de sus pequeños:
Revisión médica del primer mes
Se analizará el color de la piel
Además de la correspondientes revisiones que se le hacen al recién nacido nada más venir al mundo y a los pocos días de ese hecho, al cumplir su primer mes de vida también tendrá que ser examinado por el pediatra. En concreto, este procederá a pesarle y a medirle, examinará el perímetro de su cráneo y pondrá especial interés en aspectos como estos:
Se centrará en conocer el estado de su sistema psicomotor y lo hará llevando a cabo pruebas que vengan a dejar patente que mantiene la cabeza erguida, que reacciona a los sonidos, que es capaz de seguir la luz…
Comprobará el estado del color de su piel así como de las llamadas fontanelas.
Se encargará de auscultarle para certificar el correcto funcionamiento de su sistema pulmonar.

Revisión médica del segundo mes...