Cuando tienes un bebé en casa, las horas de sueño valen millones, y aunque hay niños que son más buenos que el pan y duermen del tirón (es  mi caso con Ricardo) hay otros tanto que no dejan pegar ojo a los papis. Pero si seguimos unas pautas y rutinas, podemos conseguir  que las noches puedan ser una delicia. 
¡Cuánto le tengo que agradecer a mis rutinas! Y es que los bebés se mueven por hábitos y costumbres, y establecer una serie de costumbres en torno a los mismos no sólo es bueno a nivel organizativo: también ayuda a los bebés a crear un entorno de seguridad y confianza.

Recuerdo el día que salimos del hospital con Ricardo, las enfermeras del hospital nos dijeron que la música clásica y las nanas " amansan a las fieras" y que si le poníamos música tranquila a la hora de dormir, Ricardo iba a ser un bebe muy bueno. Y teniendo a dos niñas pequeñas, lo que más me preocupaba era que Ricardo no nos dejara pasar buenas noches, pero lo pusimos en práctica y puedo dar fe de que a mi bebe le relaja muchísimo minutos antes de dormirse oír nanas y canciones relajantes.  
Poner música o cantar una nana a un bebé antes de dormir les ayuda a conciliar mejor el sueño, baja la frecuencia cardiaca y mejora la saturación de oxígeno en sangre. Además, la música desempeña un papel esencial en el desarrollo social del bebé. 

Los expertos han destacado la importancia de que los padres sigan todas las...